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Psicología y salud mental

La educación sexual también tiene que enseñar qué es el amor

Consejos de educación sexual y afectiva para padres
Sapos y Princesas
Sapos y Princesas
Fecha de actualización: 30.12.18

En la mente de todos los padres aparece una pregunta recurrente, ¿cuándo debo hablar de sexo con mis hijos? Desde la infancia aparecen las primeras dudas sobre las diferencias anatómicas y cómo funcionan cada unos de los aparatos reproductores. Otra cuestión frecuente es, “¿de dónde vienen los niños?” Y la respuesta nos pone en un compromiso porque no sabemos cómo responder a los pequeños a esta curiosidad tan natural. Quizás, el hecho de que sea un tema tabú es uno de los problemas por los que no sabemos cómo abordarlo y los niños crecen desinformados y buscando su educación sexual fuera del entorno familiar, por ejemplo a través de Internet o la pornografía.

Y aquí está uno de los problemas claves, quizás estas referencias (poco realistas por su contenido) son las únicas que ellos tienen y desarrollan de una manera incorrecta. A través de estos métodos, quizás aprendan la parte más mecánica, pero ¿qué hay de la parte ética y emocional que envuelve esta parte de la vida de todo ser humano? Cada vez más voces se alzan a favor de una educación sexual que también enseñe a amar y a respetar, sin importar el género o la orientación de cada uno.

Además, ante la creciente aparición de violencia de género durante la pubertad y la juventud, es fundamental enseñarles en qué consiste una pareja sana basada en valores. De hecho, un estudio llevado a cabo por la Universidad de Columbia titulado ‘La Iniciativa de Salud Sexual para Fomentar la Transformación’ apoya la importancia de orientar a los estudiantes para que construyan relaciones sentimentales basadas en el bienestar y alejadas de los estereotipos de género. Según este informe, esto podría minimizar los casos de acoso y agresión entre los más jóvenes.

Los adultos tienen una papel fundamental en la educación sexual de los jóvenes

Educación sexual: menos clases prácticas y más conversaciones profundas

En España, la educación sexual en la escuela es escasa, y en los casos en los que hay algún taller, se centra sobre todo en la prevención de ETS y el empleo de anticonceptivos. Y aunque esta labor es completamente necesaria a la hora de informar a los más jóvenes para que practiquen sexo seguro, no es lo único que se debe abordar. Y es que las nuevas generaciones está adelantando la edad media a la hora de mantener la primera relación.

Según el último estudio de la Sociedad Española de Contracepción (SEC), “la edad de inicio osciló entre los 19,4 años en el caso de las mujeres que actualmente tienen de 45 a 49 años, y los 16,37 de las mujeres que tienen entre 15 y 19”. Esto significa un salto de 3 años y una gran diferencia en el desarrollo físico y emocional de las chicas. Ante esta situación, es fundamental mantener una charla para que comprendan de manera más profunda cómo funciona su sexualidad y cómo ejercerla con total libertad, desde el respeto y la igualdad.

Informes como el que ha publicado Making Caring Common, un proyecto de la Universidad de Harvard, advierten sobre el papel que tienen los adultos, ya sean padres, docentes, psicólogos u orientadores en la educación sexual. El texto titulado ‘La charla’ habla de cómo los adultos debemos prevenir la misoginia y el acoso, ya que son unos de los principales problemas a los que se enfrentan los jóvenes, además de evitar situaciones de violencia o degradación.

Enseñar a amar es parte de la educación sexual de los jóvenes

Hay que hablar sobre el amor

Los adolescentes deben entender que hay una diferencia entre la atracción física y el amor. Los adultos deben aprovechar su sabiduría y compartirla con sus hijos mediante un lenguaje apropiado. Además, deben abordar temas como la diferencia entre el encaprichamiento, el amor y las relaciones obsesivas y tóxicas.

Enseñarles a distinguir las relaciones saludables de las que no lo son

Una buena manera de hacerlo es repasar ejemplos tanto en la vida real como en los medios de comunicación y series de ficción. Hablar con ellos sobre cómo creen que son esas relaciones y qué valores debería tener una pareja que se respeta y se ama.

¿Qué es el respeto?

Emplear frases como “hay que tratar a tu pareja con respeto” no es suficiente. Muchos adolescentes no entienden en qué consiste y realmente no saben diferenciarlo. Por eso, la educación sexual debe ir más allá y ser un tema de conversación constante entre adultos y jóvenes. Es responsabilidad de los más mayores identificar y transmitir qué situaciones no son adecuadas. Por ejemplo, controlar a través del teléfono móvil o insultar y degradar por motivos de sexo son algunas conductas que se deben contrarrestar.

Ser una parte activa

A la hora de evitar malas conductas es fundamental que los adultos se involucren y llamen la atención ante comportamientos desagradables. Para los jóvenes, el silencio puede ser entendido como permiso y aprobación de esos gestos. Entablar diálogos con los adolescentes, y entre los padres y la escuela es fundamental para ayudarles a desarrollar su sexualidad de la manera adecuada.