Amamantar en público: ¿por qué sigue siendo un tema tabú?

La Organización Mundial de Salud (OMS) recomienda amamantar durante los 6 primeros meses al bebé en función de su demanda, es decir, cuando este lo requiera (lo habitual suele ser cada dos o tres horas). Esta institución no solo defiende la lactancia natural como modo exclusivo de nutrición durante el primer periodo de vida, sino que luego recomienda seguir con ella como complemento, hasta que el niño cumpla 2 años o más. Entonces, ¿por qué amamantar en público sigue siendo un tabú?

Lo que dicen los pediatras españoles

Según explica la Asociación Española de Pediatría (AEP) en un artículo, “durante el tiempo de lactancia, la madre puede y debe hacer una vida normal con su hijo, lo que abarca el hecho de frecuentar lugares públicos: medios de transporte, piscinas, restaurantes, museos o centros comerciales”. Esto supondrá que, en más de una ocasión, al niño le entre hambre en cualquiera de estos sitios y la mujer tenga que darle el pecho. Sin embargo, es frecuente que las mujeres se encuentren con ciertas dificultades, tanto en el ámbito social como en el laboral, para amamantar en público y a menudo se ven envueltas en situaciones de discriminación.

¿Por qué existe el rechazo a amamantar en público?

“En nuestra cultura, el pecho tiene sobre todo una connotación sexual, pero en otras, es considerado en términos de su función primordial como el órgano de producción de la leche para alimentar a los niños”, afirma la AEP. En la misma línea se manifiesta Mónica Tesone, psicóloga argentina especializada en temas de lactancia materna, quien sostiene que “estamos influenciados por la sociedad que nos rodea y, en este caso, priva lo erótico”.

“En nuestra cultura, el pecho tiene sobre todo una connotación sexual, pero en otras, es considerado en términos de su función primordial como el órgano de producción de la leche para alimentar a los niños”

Las salas de lactancia no están pensadas para esconderse

“Las salas de lactancia se pensaron para proporcionar a las madres lactantes la opción de disponer de un espacio apartado, íntimo y cómodo para amamantar a su hijo, pero su uso no se ha de entender como algo obligatorio. El objetivo principal de estas salas no debe ser ocultar a las madres que dan el pecho, sino ayudarlas”, argumentan desde la Asociación Española de Pediatría.

Pero, tristemente, en más de una ocasión, el tabú que para muchos supone amamantar en público ha saltado a las redes, y hemos podido ver cómo recriminan a las madres por ello en vídeos que han llegado a ser virales, como el que os dejamos a continuación, grabado en México. 

La situación en España

En nuestro país, aunque por supuesto no se prohíbe expresamente a las mujeres amamantar en público, no tenemos una ley que regule concretamente este derecho. Solo la Ley para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres señala que se considerará discriminatorio “todo trato desfavorable a las mujeres relacionado con el embarazo o la maternidad”.

Únicamente hay dos comunidades autónomas en las que se ha reglamentado esta práctica. Una es el País Vasco, donde, en su Declaración sobre Derechos y Deberes de las personas en el sistema sanitario, de 2015, consta que las madres pueden “ejercer el derecho a amamantar a los hijos e hijas en cualquier espacio público”. La otra, la Comunidad Valenciana, que aprobó en 2016 una proposición no de ley que reconoce a las mujeres “el derecho a amamantar a sus hijos e hijas en cualquier espacio público, así como el derecho de estos niños y niñas a ser amamantados”.

En el ámbito local también se conocen otras iniciativas, como la del Ayuntamiento de Pamplona, que declaró en 2017 todas las dependencias municipales (bibliotecas, escuelas, centros culturales, parques, jardines y calles) como “espacios de lactancia materna”.

La ley que muchos reclaman

A pesar de estos avances en algunos lugares, son ya muchas las personas que están exigiendo a la administración que actúe a favor de la normalización de la lactancia materna, con leyes que defiendan el derecho de las mujeres a amamantar a sus hijos en lugares públicos.

Según un estudio realizado a finales de 2022 por la agencia de publicidad LOLA MullenLowe y el instituto de estudios de mercado LinQ Market Research España, una de cada dos madres se ha tenido que esconder para dar el pecho en público, un 63,5 % se ha sentido juzgada por ello y a un 15 % en alguna ocasión les han llamado la atención por hacerlo y las han invitado a cubrirse o a irse a un lugar más discreto. La muestra recogía el testimonio de 200 madres lactantes con edades comprendidas entre los 18 y los 50 años.

De este estudio se hizo eco la organización Teta&Teta, que incluyó en su campaña Quien no llora no mama, de enero de 2023, en la que reclamaron la creación de una ley que proteja este derecho. Precisamente, la mencionada encuesta reflejaba que el 85 % de las mujeres la ven muy necesaria.