Niños asexuales: moda o realidad

Los padres pueden reaccionar con desconcierto y preocupación ante el hecho de que su hijo se autodefina como asexual. Para poner un poco de luz en este asunto, lo mejor es analizar qué dicen los profesionales sobre la forma adecuada de manejar la situación y de apoyar a nuestro adolescente. Entre otras cosas, porque hay que tener en cuenta que solo el 1 % de la población es asexual, lo que nos lleva cuestionarnos si en todos los casos es una realidad o se trata solo del impulso por seguir una moda.

Qué es la asexualidad

Es la falta de atracción erótica hacia alguien más. Sin embargo, estas personas pueden tener sentimientos románticos e incluso excitarse en ciertas situaciones, aunque no desean intimar con nadie. No obstante, es importante aclarar que, como se indica en un artículo del Instituto Superior de Estudios Psicológicos de España, se calcula que el porcentaje de la población asexual es ínfimo (1 %). Por eso, debemos aprender a detectar si nuestro hijo tiene en realidad esta orientación o simplemente se está dejando llevar por las modas.

Lo que sí está claro es que esta inclinación no tiene parámetros estrictos. Izz Scott La Magdeleine, joven redactora del sitio Parents.com que se incluye dentro de este grupo, aclara lo siguiente sobre los individuos asexuales:

“Algunos disfrutan del sexo y lo tienen. A otros les repugna la idea. Hay quienes sienten deseo carnal solo una vez que establecen un vínculo cercano y otros rara vez experimentan este apetito. La postura puede ser estable o variable, pero eso no invalida tu experiencia”.

En el sitio web LaSexología.com, María Victoria Ramírez Crespo, sexóloga, psicóloga y terapeuta, afirma que “la asexualidad no es una elección ni una opción. Es algo que tiene que ver con una vivencia de la persona, en este caso, la falta de atracción sexual hacia otras personas. Por eso se habla hoy en día de una orientación sexual.”

Además, ofrece datos de la Asexual Community de España, que revelan que, en 2019, el 64,3 % de sus miembros eran mujeres, el 20,2 % hombres y el 15,5 % del género no binario y otros.

Cuándo suele surgir esta orientación

Generalmente, es en la adolescencia cuando se dan cuenta de que no tienen interés erótico. Así le ocurrió a Anahí Charles, una mexicana de 34 años que comparte su punto de vista con BBC Mundo.

Cuando cursaba educación secundaria, sus amigas estaban fascinadas por los miembros de la banda juvenil Backstreet Boys. En su opinión, los chicos eran “estéticamente agradables”, pero no entendía por qué las demás enloquecían al verlos.

Pasaron muchos años hasta que Anahí aprendiera lo que significaba esta orientación sexual y encontrara su lugar en ella. Al principio pasó por una fase de negación, pero continuó investigando sobre el tema hasta que llegó a la conclusión de que, efectivamente, ella era asexual.

Después se sometió a diversos exámenes médicos y hormonales para saber si había algún desajuste en su organismo. Pero los resultados indicaban siempre lo mismo, estaba completamente sana.

“Antes se pensaba que esto se refería a personas que querían estar solas, pero a mí me gusta estar con gente”, comenta. Después, en la universidad, conoció a alguien que también mostraba ese desinterés y entendió que no era la única.

Tipos de asexualidad

Según el mencionado artículo del Instituto Superior de Estudios Psicológicos de España, el llamado espectro asexual se puede presentar con distintas características:

1. Gris-asexualidad

En este caso quienes sienten un cierto grado de interés erótico puntual, pero de una forma muy leve y sin tener la intención real de intimar con alguien. Quizás en alguna ocasión se animen a experimentar situaciones sensuales, pero no será algo habitual en su vida.

2. Demisexualidad

La libido únicamente aumenta cuando existe una fuerte conexión emocional o romántica con alguien. Con esa persona pueden llegar a mantener una vida sexual activa, ya que creen haber encontrado a la adecuada. La pasión nunca surge con alguien a quien apenas conocen, sino después de haber establecido una relación de amistad profunda. 

¿Es un problema psicológico?

Definitivamente, no. La salud mental no determina la inclinación sexual de una persona. Así como hay gente hetero con y sin alteraciones emocionales y psicológicas, lo mismo ocurre con otras tendencias.

En el foro de la web MundoPsicologos.com, una madre hizo una consulta sobre su hija de 13 años, quien asegura ser asexual. Afirma haberse besado con niños y niñas, pero dice que no siente nada. La madre indica que su temor es que sea lesbiana y no quiera admitirlo.

La respuesta de un profesional de Cádiz fue:

“Es muy joven todavía, ya que a esta edad aún sus emociones y su personalidad se están construyendo. Puede que no haya sentido nada porque directamente no está atraída por esas personas en concreto o porque todavía no ha desarrollado sus sentimientos en ese sentido”.

Y sigue:

“Debería olvidarse de las etiquetas y vivir diferentes experiencias que le ayuden a madurar y a construirse internamente. Es cuestión de darle tiempo a todo”.

Por otra parte, los especialistas de Mayo Clinic sugieren la posibilidad de contactar con un médico “respetuoso y experto” para que hable con el adolescente sobre la identidad de género. También se podrían buscar los servicios de un terapeuta especializado en el tema, quien sabrá identificar si existe algún trauma psicológico que apague el deseo.

Bríndale tu apoyo

Si tu hijo te ha confesado su situación es porque busca y necesita de tu respaldo. Lo ha hecho porque cree que eres capaz de comprenderlo y no lo rechazarás. Generalmente, esto les produce a las personas un alto grado de confusión, además del temor por lo que puedan pensar de ellas.

Algunos padres estiman que se trata de una artimaña que usan los jóvenes para rebelarse. Pero esto es poco probable, ya que la mayoría ni siquiera sabe que existe esta orientación. 

Por otro lado, tampoco consideres que simplemente se trata de una fase y que “ya se le pasará”. Aunque esto podría cambiar con el tiempo, también es posible que se mantenga así toda su vida.

De qué formas puedes respaldarlo

Si tu hijo ya te confesó su preferencia y no sabes de qué manera apoyarlo, aquí tienes algunos consejos:

1. Mantente a su lado

Permanece disponible para él o ella. Escúchalo cuando desee hablar. Es muy importante que no lo juzgues e intentes ser comprensivo ante sus inquietudes. Dale tiempo para que reflexione y no te apresures a soltarle una retahíla de consejos.

2. Interésate por sus preocupaciones

Ellos solo quieren que los escuches con atención y le des importancia a los aspectos que les causan nerviosismo, como la opinión de los demás o la duda de si padecen un problema hormonal que les impide sentir esta atracción.

En todo momento muestra una actitud comprensiva y cálida que le transmita seguridad. Recuerda que si no encuentran en ti el soporte que necesitan, lo buscarán en alguien más.